Pay Dirt es la columna de consejos financieros de Slate. ¿Tengo una pregunta? Envíaselo a Atenea y Isabel aquí.. (¡Es anónimo!)
Estimado Pay Dirt,
Mi medio hermano se va a casar con la novia del infierno, «Denise». Ella quiere una boda de princesa, pero no tienen ni dos centavos para juntar, por lo que depende constantemente de nuestra comunidad local para recibir obsequios.
De hecho, Denise fue a varios restaurantes y les ofreció exposición si patrocinaban su boda. Ella se considera una «influencer». La mayoría de mis amigos son personas creativas que intentan ganarse la vida de una forma u otra. Dennis me acosa constantemente para pedirles un descuento para «amigos y familiares» o para cooperar. Intento mantener la calma con ella, pero Denise es muy dura. Mi compañero de cuarto estaba tomando fotos de mascotas al costado y Denise lo arrinconó durante la cena para tomarle fotos de compromiso gratis. Él le dijo que lo gratis no paga las cuentas y ella básicamente lo llamó acaparador de dinero. Nos marchamos en lugar de montar una escena. Ni siquiera se ha fijado aún la fecha. Temo tener que lidiar con esto en los próximos meses. Mi hermano no ayuda. ¿Cómo sobrevivo a esto?
— De la novia rota
Querida Bridezilla en quiebra:
El hecho de que tu hermano no vea ningún problema no significa que tú o cualquier otra persona de tu círculo creativo deba trabajar gratis. La exposición no paga las cuentas y ser honesto al respecto no te convierte en un acaparador de dinero. Significa que ve valor en su servicio profesional.
Hay dos conversaciones por mantener. Primero, llama a tu hermano a un lado y dile que aprecias la determinación de Denise de conseguir un buen trato, pero que te avergüenza a ti y a tus amigos al pedir constantemente «cooperación» a todos, lo que en este caso significa trabajo gratuito. Lo más probable es que no sepa cómo funcionan las colaboraciones en términos de personas influyentes o las cifras y el alcance real necesarios para la mayoría de las colaboraciones.
Si él no ofrece una solución, o si ella continúa insistiendo, no temas decirle cortés pero firmemente: “Sé que estás emocionada por tu gran día, y yo también. Pero pedirme que llame a todos mis amigos para patrocinar tu boda me hace sentir incómodo. Ellos, al igual que yo, valoramos nuestro trabajo y, por tanto, deberían recibir una remuneración adecuada. Ya no tendré esta conversación y agradezco su comprensión”. No participe y proceda a abandonar la habitación o finalice la conversación si continúa. Al final lo conseguirá; si no, entonces es necesario tener un tipo diferente de conversación con ella y tu hermano.
– Atenas
Prudie clásica
Hace dos años adopté un perro de un rescate local. Nunca he tenido uno, solo gatos. Desde fuera parecía algo que mucha gente disfrutaba muchísimo y pensé que podría ser bueno para mis hijos, como dice la gente. Pero a mí nunca me lo quitaron. Simplemente no soy un amante de los perros, y resulta que mis hijos tampoco lo son.